2.2. Conductas positivas

Esta actividad va dirigida al primer curso de primaria donde hay un alumno con TEA que sí tiene lenguaje oral pero en el aula participa muy poco.

La tutora y yo, usamos una hora de tutoría para llevarla a cabo, usando los grupos de aprendizaje cooperativo, les pusimos a pensar en grupos de 4 sobre qué aspectos/conductas se pueden cambiar para que mejore el clima y la dinámica de la clase. Pasados unos minutos, nombramos a un niño o niña de cada grupo como portavoz y los seis portavoces se colocaron al lado de la pizarra digital y expusieron al resto lo que ellos creían que se podía cambiar. Mientras ellos iban enumerando las acciones, yo iba recogiéndolas en un documento de texto en el ordenador para que al finalizar pudiésemos leerlas todas y escoger cuatro que nos parecían fundamentales para el buen funcionamiento de clase.
Para escogerlas, cada niño votaba una sola de las conductas y las que más votos tuvieron fueron las elegidas. Hubo una conducta que salió elegida y la cambiamos el nombre por una técnica de aprendizaje cooperativo que nos interesaba adquirir "se mi profe".

Las conductas negativas las transformamos en positivas en el momento en el que algún portavoz la decía y con todas ellas se elaboró un cuadro en el cual se comentaban los puntos qué se ganaban por cada conducta positiva bien realizada.

Además, generamos otro cuadro en el cual aparecían una serie de premios que se conseguían con los puntos conseguidos (los puntos, aprovechamos e introducimos euros de papel para que se fuesen familiarizando).

Durante la semana, los niños en sus bandejas individuales de material (donde tienen el lápiz, la goma...) iban recibiendo una serie de fichas o iban perdiendo si habían ganado si habían hecho algunas de las conductas del panel. Finalmente, todos los viernes se dedicaban entre 10-15 minutos para canjear las fichas por el dinero conseguido, el cual lo metían en una bolsita que tenían en la bandeja del material.

Una vez al mes, se revisaban los puntos y se podían cambiar los premios, finalmente esto fue así al principio, después muchos niños se ocupaban de ver el dinero que tenían y de cambiarlo; aún así como había alguno en la clase que no (entre ellos nuestro alumno con TEA) seguíamos revisando mensualmente.

Por otro lado, nosotras hemos llevado un registro de los premios que han ido consiguiendo cada uno y de las conductas positivas que más y que menos han llevado a cabo. En el caso concreto del niño con TEA, hemos trabajado dentro y fuera del grupo-clase para que las llevase a cabo, en especial, solicito ayuda y aviso cuando he terminado.

Además, como podéis observar en la infografía-póster, hemos colocado un premio (el más fácil de conseguir) para que la familia también estuviera implicada.

Aquí os dejo la infografía que tenían los niños en la corchera de la clase.



Por otro lado, después de haber llevado a cabo esta actividad nos hemos planteado para el próximo curso utilizar la app "class dojo" ya que nos resulta bastante atractiva y sencilla de utilizar.








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